La viabilidad de un negocio pasa por mantener una adecuada salud financiera del mismo. Existen una serie de aspectos claves que, si se mantiene un control sobre ellos la prosperidad de tu empresa no tiene porque sufrir ningún tipo de sobresaltos.
1.- Revisión de la situación financiera
Las finanzas son el reflejo de lo que está pasando en tu empresa. No prestar atención al flujo de caja, a los ingresos o que costes puedes recortar sin dañar tu propuesta de valor son algunos de los factores que puedes controlar haciendo esto.
2.- Controla tu fondo de maniobra
Esta es la principal variable que refleja la salud de tu compañía. El fondo de maniobra es el resultado de la diferencia entre los capitales permanentes y tu activo fijo. Si todo va bien, debe haber una parte de tu financiación a largo plazo a financiar activos a corto.
3.- Cash-Flow
Controla los flujos de caja de tu empresa. Los plazos en los que tienes que cobrar los ingresos deben ser suficientes para afrontar las obligaciones de pagos.
4.- Los plazos de cobros y pagos
Tienes que ser capaz de ajustar los tiempos de cobros y pagos en la medida de lo posible. No es igual cobrar a 120 días que a 30. Es necesario mantener dicho equilibrio si no quieres tirar de financiación externa o recursos propios.
5.- ¿Cuál es la composición del beneficio?
Compara el resultado real con el previsto para medir tu evolución. Pero sobre todo, debes hacer hincapié en su origen.No es lo mismo que dicho beneficio provenga de la actividad de tu empresa que de liquidar un inmovilizado.
6.- Distingue entre beneficio y caja
No, no es lo mismo. El beneficio engloba lo que ingresas, es decir lo que vendes. Pero si ingresas a 180 días y no tienes efectivo, no tienes caja.
Uno es un concepto contable, mientras que la caja es un concepto real
7.- Rentabilidad frente a margen
No es lo mismo obtener margen que rentabilidad. La rentabilidad es un ratio que va a medir tu eficiencia, mientras que el margen es una comparación en la cuenta de resultados entre ingresos y gastos.
8.- ¿Incluye tu precio todos los costes?
Lo que vendes no es sólo margen sobre el coste directo. Debes imputar los costes indirectos como transporte, luz, empleados, agua… Quizás no estés ganando dinero a tu producto o al menos el que debes.
9.- Los tipos impositivos
Es una forma también de generar ingresos. Aunque, no debemos basar el desarrollo de nuestra empresa en este tipo de cosas. Deben ser ayudas puntuales y tomarlas como tal.
10.- El rendimiento económico
¿Conoces la remuneración que te generan los fondos propios, condicionada por el rendimiento que obtienes de tus inversiones así como el nivel y coste del endeudamiento? ¡Pues este ratio es para ti!
Como verás, el mundo de las finanzas requiere de conocimientos, tiempo y capacidad para desarrollarlo de la mejor manera posible. Si decides delegar esta labor a alguien de tu empresa, dale el tiempo suficiente para hacerlo correctamente. Sino, ¡siempre podrás externalizarlo a una compañía como la nuestra!